El verano está a la vuelta de la esquina, comienza la época del aire acondicionado, y con él llegan un año más las irritaciones de garganta.
Uno de los síntomas comunes a la infección por gripe o resfriado es la faringitis, o lo que es lo mismo, la inflamación de la faringe, la cual se presenta con mayor frecuencia durante las estaciones de invierno y verano.
La mayoría de los casos de faringitis son producidos debido a infecciones por virus, aunque también es posible que se presente por bacterias, como el estreptococo.
Los síntomas más comunes que se manifiestan con una faringitis son:
- Tos seca
- Fiebre
- Malestar general
- Dolor en la garganta
¿Qué tipos de faringitis existen?
La faringitis puede ser de dos tipos:
- Aguda
Es la producida por bacterias y virus. Suele ser muy habitual durante la infancia y su duración es de una semana aproximadamente.
- Crónica
A diferencia de la faringitis aguda, esta no tiene causa infecciosa. Es un proceso inflamatorio con un tiempo de evolución más prolongado y que se puede producir por agentes químicos o reflujo gastroesofágico.
¿En qué consiste el tratamiento de la faringitis?
En un primer momento se llevará a cabo un examen físico por parte del profesional en el que se evaluará en qué estado se encuentra la garganta.
Normalmente el tratamiento para la faringitis se lleva a cabo mediante antibióticos, pero desde Clínica Dr. Casado tratamos de evitar su uso excesivo, apostando por productos naturales que además estimulan el sistema inmune.
5 consejos para tratar de aliviar la faringitis:
- Evita los ambientes excesivamente secos
- Ventila correctamente la casa y humidifica el ambiente
- Controla el uso de aire acondicionado
- Ingiere alimentos blandos que no estén ni muy calientes ni muy fríos
- Evita el consumo de alcohol, tabaco o alimentos picantes